Nos queda Barbie para rato

Independiente de las cifras rojas que va mostrando Barbie como producto competitivo dentro de la industria juguetera mundial y los poco afortunados nuevos lanzamientos de líneas como la Barbie Entrepreneur o "Emprendedora". Además de varias campañas en contra del Rosa típico de Barbie con aquello de que Pink Stinks, o de la escalada de mujeres que en pos de una liberación femenina mal entendida, después de quemar el braciere, consignaron a la mentada muñeca, como el centro de sus iras y malestares. Aún con toda una escalada de campañas en su contra, de todas formas nos queda Barbie ciudadanos; y no hay mejor muestra para ello que la última colección de ropa y accesorios de Moschino, inspirada absolutamente en Barbie y su multifacética personalidad.

Jeremy Scott, diseñador de la marca Moschino volvió a la pasarela de la Semana de la Moda en Milan cargado con atuendos color rosa y surtidos guiños a Barbie, con modelos que se inspiraron en "clásicos"  Barbie, incluida hasta una Barbie Rollerskate de carne y hueso. La colección completa se puede ver en el siguiente link: http://player.indacolive.com/player/jwp/clients/moschino/14/09/                                                                

Tal vez lo más destacable de esta colección, sea el hecho que el color se tomó la pasarela en Milan, con una brillante y divertida muestra de Moschino inspirada absolutamente en Barbie.

Puede que a muchos la muñeca no les guste y nunca les haya gustado, pero al igual que Elvis Presley o Marilyn Monroe, Barbie es un icono mundial que trasciende más allá de las fronteras de sus juveniles seguidoras, si no que también crece como un referente de inspiración para, en este particular caso, abrir la Colección Primavera-Verano 2015 de la marca de ropa italiana Moschino.

Barbie es un icono en la moda, porque desde su nacimiento hasta hoy en día, ha sido una chica trapera, con gustos diversos y gran cantidad de ocupaciones, atuendos, necesidades y transformaciones. Ha contado con diseñadores de renombre mundial que le han hecho sus vestidos, la han surtido de zapatos y le han cambiado hasta la cara y el cuerpo, para que sea mucho más que una simple muñeca. Ha sobrevivido a la  Ama de Casa con sus conjuntos de comienzos de los 60, ha pasado raspando con las hombreras super exageradas de los 70 y hasta ha logrado salvar por un pelo del cáncer a la piel con sus discretos trajes de baño de Barbie Malibu. Ha resistido sin chistar lentejuelas, glitters, colores neón, plumas, strech y hasta latex, sin haber perdido ni la compostura, ni su sonrisa eterna. Ha sido rubia, trigueña, colorina, negrita, africana, asiática, latina y hasta musulmana en su necesidad de identificarse con las niñas el mundo entero. No le ha hecho el quite a casi ningún trabajo, siendo desde presidenta, hasta madre de una surtida progenie (aunque para ello no necesitó perder la figura, si no simplemente adosar con imanes una pancita que aparece y desaparece como por arte de magia), incluso se ganó el mérito de ser la única muñeca que ha contado hasta con una chica astronauta.

Versátil, vivaz, con estilo y adaptabilidad para representar los distintos cambios de la moda a travéz de los años, Barbie es sin duda un ejemplo a seguir, una inspiración a sentir, un icono que nos guste o no nos guste, no es tan simple pasar por alto y hacer como que nunca ha existido. Por ello, conocerla en todas sus facetas, recrearse con todas las increíbles colecciones de ropa, zapatos y accesorios que ha generado en su vida, aprender de todas sus capacidades camaléonicas, para pasar de un simple símbolo sexual a una Barbie del mundo y hasta del universo, interpretando a maestras, dentistas, veterinarias, doctoras, cantantes de rock, simples chicas que se asolean en una playa, campeonas olímpicas, porristas, modelos, surfistas, en fin, cientos de actividades y ocupaciones que ninguna otra muñeca en el mundo podría asumir, es para que consintamos que aún nos queda Barbie para rato.

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